Todas las empresas, independientemente de su tamaño, pueden sacar beneficio de las bonificaciones que establece FUNDAE para la capacitación de sus trabajadores. Así que muchos de los responsables muestran interés por saber qué deben hacer para conseguir estas ayudas. Aquí te contamos los pasos esenciales que debes dar para ello.
¿Qué requisitos establece FUNDAE para poder impartir formaciones bonificadas?
Tanto los centros formativos, como las empresas con trabajadores asalariados que cotizan por formación profesional pueden organizar acciones formativas bonificadas para mejorar las destrezas de los trabajadores.
Una de las exigencias imprescindibles para ello es que la empresa o el centro esté dado de alta en el Registro Estatal de Entidades de Formación, de FUNDAE, tal y como se recoge en el art. 9.3 Ley 30/2015, de 9 de septiembre.
Dicho registro contiene los datos necesarios para identificar la empresa, además de información sobre sus acciones formativas.
¿Qué tipo de formación se puede bonificar?
Es fundamental que las formaciones estén relacionadas con las acciones que lleva a cabo la empresa y con el puesto de trabajo del profesional que la va a recibir.
En cuanto al formato de la formación en sí, queda a la libre elección de la empresa. Es decir, será esta la que decida los contenidos a tratar, su duración o los requisitos que crea oportunos.
Eso sí, las acciones formativas para que puedan ser bonificadas por FUNDAE deben durar un mínimo de 2 horas y no ser de más de 8 horas al día, si no se imparte en una sóla jornada.
Si nos fijamos en la modalidad de la formación, esta podrá ser presencial o a través del aula virtual o incluso la opción de un híbrido entre ambas (formación mixta).
Cada formación no debe contar con más de 30 alumnos si es presencial, ni más de 80 si es mediante teleformación.
Las formaciones deben ser completamente gratuitas para los profesionales que van a recibirlas.
No son bonificables acciones formativas de tipo informativo o divulgativo, como son los congresos, seminarios y similares.
¿Qué documentos son necesarios para que FUNDAE bonifique las formaciones?
Para ser un centro de formación bonificada por FUNDAE, además, es necesario contar y conservar durante un periodo mínimo de 4 años la siguiente documentación para cada formación que se imparta:
- Currículum Vitae y acreditaciones del formador o formadores.
- Pruebas de evaluación.
- Hojas de control de asistencia.
- Recibí de materiales necesarios para la formación.
- Cuestionario de evaluación
- Diploma por haber superado la formación o certificado de asistencia.
- Factura correspondiente.
¿Cómo dar de alta a un centro de formación en el registro estatal de entidades de formación?
Para que una empresa o centro de formación se inscriba en el registro de FUNDAE, debe seguir el siguiente proceso telemático:
- En primer lugar, debe contar con el correspondiente certificado de persona física o jurídica.
- Acceder a la plataforma telemática habilitada para ello e identificarse con certificado digital o Cl@ve.
- Dentro de la misma, acceder a “Inscripción sin especialidad”.
- Cumplimentar debidamente una declaración responsable.
- Indicar las especialidades profesionales en las que quiere formar a los trabajadores.
Una vez realizada la solicitud y presentando la documentación exigida, FUNDAE lo revisará todo y nos dará de alta en su registro si es que tenemos su visto bueno. Será a partir de entonces cuando podremos bonificar las formaciones profesionales que organicemos según los criterios que hemos mencionado anteriormente.
Pero aquí no queda todo. Y es que de aquí en adelante tendremos la obligación de someternos a las inspecciones y auditorías de calidad que desde FUNDAE estimen oportunas. También tendremos que comunicarle cualquier cambio jurídico relacionado, como puede ser en la titularidad.
Disfrutar de las bonificaciones a la formación que ofrece FUNDAE requiere de un proceso documental que puede llevar horas. Afortunadamente, desde SoWeSign hemos desarrollado y te ofrecemos una solución que lo agiliza en gran medida.
Con ella, podrás digitalizar y automatizar, de extremo a extremo todas las operaciones imprescindibles para bonificar formaciones incluso las que implican trabajar con las firmas de alumnos y formadores, las cuales deben recogerse en prácticamente todos los documentos que FUNDAE exige.
El resultado: horas de trabajo ahorradas, mayor productividad, menos errores y mayor aprovechamiento de los recursos en tareas de más valor, entre otros. ¿Quieres disfrutar de todo esto? Contacta ya con nosotros y pídenos una demo personalizada.